medida de versos: 
Cerrar podrá mis ojos la postrera 
sombra, que me llevare el blanco día,
y podrá desatar esta alma mía 
hora, a su afán ansioso lisonjera; 
mas no de esotra parte en la ribera 
dejará la memoria en donde ardía; 
nadar sabe mi llama la agua fría 
y perder el respeto a ley severa; 
Alma a quien todo un Dios prisión ha sido, 
venas que humor a tanto fuego han dado, 
médulas que tan gloriosamente ardido.